No tengo disciplina para llevar esto a cabo de modo continúo. No siempre tengo tiempo, si tengo tiempo, no tengo inspiración y así, se me van las ideas, sin quedarse plasmadas en mí blog virtual.
Siempre he dicho que un intento más, nunca es tarde. Siempre he sido empática, con el decir "Nunca es tarde para empezar..."
Aquí estoy de nuevo, desempolvando algo que tanto quise, que visualicé, pero a lo que no me dedique.
Quizás el tiempo libre de una cuarentena repetida, los 39 días encerrada (al día de hoy), el miedo a lo que está por venir, la angustia de no estar con los míos, y claro, una misa despierta y activa, me trae de nuevo por aquí.
Insisto, no sé, a qué dedicar el Blogger, creo que le haré caso a mi amiga Mariale, y comenzaré a publicar mis poemas. Recopilaré los publicados en mí Instagram
Para comenzar a darle forma y a sentirme identificada con mi espacio virtual y conmigo misma.
Un desastre hecho mujer, pero con buenas intenciones.
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